lunes, 22 de junio de 2015

Arqueologia Biblica : Moisés, mito o realidad - Documental completo

Algunos descubrimientos[editar]

Una reconstrucción de la Jerusalén del siglo I, posible gracias a los aportes de la Arqueología Bíblica.
El Papiro P52, el texto más antiguo del Nuevo Testamento conocido, fue descubierto en 1920, en el desierto de Egipto Medio, y sacado a la luz pública en 1935.


Los Manuscritos del Mar Muerto, descubiertos en las cavernas de Qumrán en el año 1947 por beduinos y cuyas excavaciones se iniciaron en 1950.
Entre 1962 y 1963 se descubrió el Papiro12 de Wadi Daliyyat o Papiro de Samaria de época persa.
En 1964 se descubrió el Papiro de Ketej-Jericó de época persa-helenística.
En 1991 se descubrió la llamada Tumba de Caifás, aunque no está cerrada su identificación como tal.
En 1993 se descubrió la estela de Tel Dan.
En 1996 se descubrió la inscripción del Tel Mikné con el nombre de la ciudad filistea de Ekron y una lista de sus reyes.
En 1997 se descubrió el antiguo monasterio de Katisma.
En 1998 se descubrió la Sinagoga de Jericó datada del año 75 a. C. (Ehud Netzer).
En 2007 se descubrió la tumba de Herodes.
La arqueología bíblica es también objeto de célebres falsificaciones motivadas por múltiples intereses. Una de las más célebres se presentó en 2002, cuando se publicó el supuesto hallazgo de un osario con una inscripción que decía "Jacob, hijo de José y hermano de Jesús". En realidad el hallazgo se había producido veinte años atrás, tras los cuales la pieza sufrió un extraño cambio de manos y la inscripción se hizo posteriormente, dado que ni siquiera corresponde al patrón de la época.13